La estrategia de vacunación PMV®-01 se basa en el principio de protección cruzada, un mecanismo muy conocido de la virología vegetal. En una primera infección con el virus del mosaico del pepino, se activa el sistema inmunológico de la planta. Más adelante, cuando la planta entra en contacto nuevamente con el mismo virus, el sistema inmunológico de la planta reconoce el virus y entra en acción. Como resultado, el virus que causa la presión de infección será eliminado por la planta misma.
Mientras más alto sea el nivel de similitud genética entre el virus que causa la primera infección y el virus que causa la presión de infección más adelante, más eficaz será el funcionamiento del mecanismo. La sustancia activa de PMV®-01 contiene un aislado leve de la cepa chilena del PepMV. Este aislado chileno leve y estable se instala rápidamente en todas las partes de la planta, por lo que el sistema inmunológico de todo el cultivo se activará entre 4 y 6 semanas después de la vacunación. Después de este período, la planta estará protegida ante ataques futuros de los aislados agresivos del PepMV. Además, el aislado leve no provoca síntomas en las frutas y no repercute en la producción ni en la calidad.
Daño del PepMV en tomates
Sin síntomas del PepMV luego de la vacunatión